"La ya fenecida generación punk se ve reflejada en la película "The great Rock'n'roll Swindle", que nos ofrece una visión distinta de lo que fueron los Sex Pistols en realidad.
Bastante más éxito consiguen The Jam. Su cantante, Paul Weller, consigue una dosis suficiente de poesía y pragmatismo en sus textos que le convierten en uno de los compositores más frescos de los últimos años. A ellos les gusta que la gente comprenda lo que están tocando y cantando. su ideología mod se pone de nuevo de moda en Gran Bretaña.
Las chaquetas de mohair, el cabello muy corto, las guitarras Ryckenbacker.... incluso logran un cierto reconocimiento en Estados Unidos, un país a donde nunca llegó esta cultura tipicamente británica."
SAINTE ANTHONY'S FIRE - SAINTE ANTHONY'S FIRE (1970)
Power trio que realizaba hard rock, procedente de New Jersey. Su única herencia sería este homónimo disco, del que pocas copias salieron a la venta.
AMOS KEY - FIRST KEY (1974)
Otro power trio, pero esta vez originario de Alemania. Se decantan por el uso de teclados y por ende se les incluye en le movimiento progresivo, comparándolos con bandas como ELP, The Nice, Ekseption, e incluso Deep Purple
Banda
norteamericana, concretamente de Connecticut, cuyo inicio se fecha en
1969. Solo van a dar lugar a un álbum dos años más tarde en 1971,
sin embargo en cuestión de 6 ó 7 meses tras su formación,
escribirán un buen montón de demos que enviarían a compañías de
discos, en lugares estratégicos para el contacto como New York y Los
Angeles. Pronto recibieron respuesta interesada por parte de la MGM
Records y sin dilación firmarán un contrato grabando su primer
trabajo cuyo título será homónimo al nombre del grupo.
Nada más programar
un tour para girar por toda la nación, el guitarrista Robert
Giannotti co-fundador, sin previo aviso y sin razones claras
abandonará la nave en el arranque de un debut ante el gran público.
Su reposición no resulto una labor fácil, y tras un periodo sin
conseguir el componente apropiado, el proyecto se disolvió de mutuo
acuerdo pero con la latente idea de volver.
Soldan y
Cannatta durante el tiempo que el grupo funcionó,
estuvieron muy interesados por la escena progresiva Británica,
viajan a Londres para explorar las posibilidades musicales, se
tomaron unas vacaciones en Mallorca, donde escribirían la mayor
parte de las composiciones más memorables, incluidas en el álbum
del que hablo en estas líneas. Es por ello que estamos ante una
formación norteamericana, que no se corresponde con las
características de la extensa mayoría ubicada en su país, en lo
que concierne al rock progresivo y sinfónico. La influencia
recibida por lo que escucharon en Europa es definitiva a la hora de
crear sus temas, alejándose del rock más contundente y duro que
protagoniza el progresivo en EEUU, más próximos a compatriotas como
GRAVITRAIN y similares.
En el periodo en que
se empaparon durante su visita a las islas Británicas, accedieron a
diversos conciertos, en uno de ellos contemplarían a YES en
acción. Entre bambalinas consiguen aproximarse para conversar con
Rick Wakeman, a quién le preguntan por el Mellotrón,
un instrumento desconocido para ellos y por el que sienten una gran
atracción. Wakeman les indica la función del aparato y su
aplicación en el rock progresivo, pero les advierte del precio
excesivo que conlleva comprarlo. Las cifras son imposibles de
alcanzar, no pueden acceder a él, sin embargo no cejan en el empeño
y tras una serie de búsquedas por diferentes circuitos, van a lograr
embarcar en su viaje de vuelta a casa con uno por un precio ridículo,
700 libras.
Su estilo totalmente
entregado al sonido europeo está construido sobre unas texturas
generadas por guitarras rítmicas acústicas y las voces de todos los
miembros, una constante en cuanto a coros que vertebra los temas,
clave para todas las piezas, grandes voces que se convertirán en el
elemento de cohesión, y que tienen mucho de los magistrales juegos
vocales (Portrait My Lady Angelina) que los
MOODY BLUES, nos brindaron en tantos y tantos momentos.
Y no solo van a tomar de referencia esa magia de voces, también el
empleo de la flauta dulce y los arreglos a cargo del piano, sublimes
a lo largo de todo el disco, y fundamentales es el entresijo de los
desarrollos instrumentales que llevan a cabo. No son piezas extensas
en las que se sumerjan en trabajos instrumentales progresivos, pero
si es cierto que tienen una complejidad que no suele ser habitual en
grupos que debutan, en los que la producción suele ser más bien
deficitaria, pero en el caso de estos chicos, es un elemento a tener
en cuenta y muy cuidado. Sus creaciones no ofrecen secciones ni
cambios de ritmo abruptos, su estructura es más bien sencilla
aunque muy alimentada de diversidad instrumental. No obstante no
estamos hablando de cuatro amigos que se han juntado para empezar a
tocar, antes de acabar siendo miembros de JASPER WRATH , ya habían
obtenido experiencia todos ellos tocando en agrupaciones locales.
Escuchando con
detenimiento podemos observar que bebieron de diferentes fuentes,
aunque lo primero que nos viene a la mente sean MOODY BLUES, hay
otras bandas que también calaron en las ideas de estos americanos.
Las atmósferas que flotan en la mayoría de los cortes son más de
corte sinfónico, pastoral, sin crudezas, buscando constantemente la
melodía apacible, en las que apenas entra la guitarra eléctrica
para destacar, y cuando lo hace es en términos de distorsión
aportando ese pequeño margen psicodélico a las composiciones.
Look to the
sunrise me recuerdainevitablemente a SPRING,
MOODY BLUES y otros similares, donde se respira un cargado aire a la
inglesa, pero también mostraron interés por el sonido oscuro de
formaciones underground como PINKFLOYD en Odyssey,
donde juegan con los armónicos de las guitarras y la guitarra
acústica suena muy Gilmour. Did you know that y
Drift through our cloud asombran por los ritmos introducidos,
más propios de encontrarlos en la música de SANTANA, con un
fuerte sabor latino, la primera con riff de guitarra hard, única en
todo el álbum, y la segunda que salvo por el ritmo, es como si
fuera cantada a capela. Parece que no solo fue en Inglaterra donde
recogieron información.
El interés que
mostraron en el mellotrón durante su estancia en el viejo
continente, no tiene reflejo en el único álbum que alcanzará las
tiendas. Tal vez debido a que no habían aprendido todavía a
utilizarlo, cuando grabaron el disco, o porque las piezas ya estaban
establecidas para ser grabadas de esta manera o se limitaron a
reforzar los coros vocales. Puede ser que en la única pieza que se
aprecie sea, la que da finalización a la obra (Roland of
montever), un track donde la influencia del sonido canterbury
es patente, con un inicio y final al estilo In the court of the
Crimson King, pero esto ya es cosa mía . En su lugar
utilizaran los sintes del momento y tampoco veremos aparecer en
ningún instante el viejo Hammond C3.
Tras la grabación
de su obra continuaron en el panorama realizando apariciones en
programas de radio y televisión locales, tocando aquí y allá, pero
no aunaron fuerzas para seguir adelante creando nuevos temas que
ofrecer. Definitivamente la plaza de guitarra fue ocupada por Scott
Zito, que nunca llegaría a grabar un nuevo LP, se limitó a
participar en las andanzas de la banda en el circuito de actuaciones
destinadas a un público más reducido, hasta llegar al final de la
historia en 1976, donde la disolución fue irrevocable.
"Su verdadero nombre era Reginald Kenneth Dwigth(1947), pero se lo cambió por los de Elton Dean(miembro de Soft Machine) y John Wayne(su actor favorito). Durante los años sesenta él y el letrista Bernie Taupin hicieron canciones como asalariados de una editora, cobrando 10 libras a la semana.
Su voz, única, le llevó a debutar en solitario, tocando siempre el piano, y ya con su segundo LP, en mayo de 1970, comenzó su leyenda. En los seis años siguientes aportaría una docena de grandes éxitos y LP capitales como Madman across the water o Blues moves.
Excéntrico, por lo general disfrazado, pero siempre genial, se le considera el mejor compositor de los años setenta, capaz de crear sublimes melodías y tonadas rápidamente estandarizadas. En 1973 incluso formó su propia discográfica y, entre sus singularidades, destaca que presidió el club de fútbol Watford, por entonces en la tercera división inglesa."